Como los últimos años, hemos ido a pasar unos días de veraneo a Mallorca. Tere, Jaime y yo. En estos días no puede faltar la visita al tranvía de Soller. Este año habíamos previsto ir hasta la ciudad en el tren que une Palma con Soller, al final no se arregló y lo hemos dejado para el próximo. Pero el tranvía gozaba este verano de una actividad mayor que otras veces, circulando varios convoyes a la vez y todos llenos de turistas.
La conservación de los coches y automotores es muy buena y no estaría demás que las autoridades autonómicas emplearan un dinero en mantenimiento de la vía, tal vez lo más deficiente.
Por último en la estación de Soller, merece la pena visitar el edificio y el andén, pudimos ver que ya existe una reproducción del Tranvía de la marca Ocre. Yo empiezo a hacerlo ya, pero sería necesario la elaboración de nuevos modelos a escalas mas pequeñas.